La Cancha 3 - El Galeón 1

Comenzó el encuentro con una formación no muy habitual, con Roge a la derecha y Jose como director en el centro. Alberto a la izquierda, atrás Juan y Xavi, y Kike en punta. Meri volvía al arco tras varias jornadas. Los comienzos no tuvieron claro dominador aunque se intuían pinceladas de lo que sería el resto del encuentro: jugadas rápidas de ataque del Galeón, pero sin precisión en los metros finales y jugadas aisladas con más desiquilibrio por parte Canchera. En una de éstas Kike conseguía el primero mostrando habilidad para cazar goles. Con el marcador en contra, el Galeón se lanzaría más fuerte arriba pero sin resultado, propiciado por el buen trabajo de la Cancha en una defensa orquestada por Mariano. Y llegó la mala suerte en forma de balón mal pisado por Tober cuando estaba sólo y (ni siquiera) en mediocampo, cayendo con todo sobre el tobillo. Se le acabó el partido y tiene, al menos, para un mes. Con la entrada de Óscar por la izquierda se pierde desborde pero ganamos consistencia, recogiendo Jose la responsabilidad de enlazar el juego de ataque de la Cancha. Cumplió y de qué manera. Abrió el catálogo de regates (brutal el de la frontal: cambiando el balón desde el pie derecho al izquierdo y otra vez al derecho, todo en el aire y estando a mitad de zancada. Y es la segunda vez en dos jornadas que lo hace, por si alguien piensa que fue de coña), sombreros, controles y pases; hizo el segundo gol a pase de Kike; regaló un pase a Roge que no entró, desquició a los centrales y dejó temblando el poste con un disparo que hubiera sido un golazo. Con el 2-0 Óscar se incrustó entre los centrales para dar consistencia y abastecer a la dupla Kike-Jose y el ir y venir constante de Roge. El final del partido vino con el recorte de distancias del rival propiciado por un encontronazo entre Juan y Barny al intentar cortar una jugada que dejó media área vacía. Emoción para el final y el gol del partido para Óscar que estuvo listo y pidió sacar con el balón adelantado un saque de puerta que acabó dentro y sobre el pitido final.
A ver ahora cómo se desarrollan las jornadas de los sábados, porque si ya andamos escasos de gente esos días, el añadido de que falte un jugador como Alberto, capaz de asumir responsabilidades a la hora de ofrecerse y atacar es un palo...

Ánimo y un abrazo Crack!