Aquí va una nueva entrada, que me habéis dado mucho la coña con actualizar esto y tenía ganas de meter este post. Vamos a dar un pequeño repaso a las equipaciones que han ido emergiendo al paso del tiempo en el club. Me refiero a equipaciones aceptadas como tal. Evidentemente aquel truño de camiseta azul marino de los 40 principales/Canterbury Tavern, que su mayoría de unidades acabó sin mangas, no cuenta. Comenzando precisamente por ese torneo (triathlon en el Parque Deportivo Ebro) arranca este repaso. En el verano de 2004 se compone e inscribe el "Atlético Latino". Más tarde este nombre sería descartado por el machaque de Alex con una ya famosa lapidaria frase que no viene a cuento. Aquella formación estaba compuesta en su mayoría de lo que luego sería el grueso del Atlético La Cancha. Y en aquella ocasión, con la mente ya puesta en fundar el nuevo club, Alberto y Roge se encargaban de vestir al equipo. La combinación constaba de una camiseta de H&M blanca con serigrafía amarilla "de serie" y con el número negro que los citados se encargaron de llevar a buen puerto. El pantalón blanco y medias blancas corrieron a cargo personal de cada uno. El equipaje en sí estaba bastante bien tanto visualmente como las pelas invertidas. Los números quedaron algo bajos (muy bajos, en los riñones casi), y debido a la serigrafía de "masa" que nos plantaron, el que se te quedara pegada la camiseta en esa parte de la espalda era inevitable. Aunque teniendo en cuenta que la equipación era para ese torneo y poco más nos damos con un cantico en los dientes y p'alante.
El verano va tocando a su fin y se van perfilando los aspectos oficiales del equipo. El aspecto físico toma gran importancia, y aunque en un principio hay total acuerdo en el uniforme a lucir, las circunstancias nos llevan por otro camino. Debido a las características del equipo inculcadas desde los orígenes en la A.D. Calasancio (eso es otra historia) el espíritu de garra con añadidos chispazos de alta calidad en todas las líneas es una constante, por lo que la identificación con el estilo juego argentino fue aceptado de buen grado por todos los componentes iniciales del Atlético. De ahí que en primera instancia se apuntara hacia los colores albicelestes combinados con negro como primera opción para el uniforme. Las condiciones hicieron que el uniforme primero y definitivo de aquel año fuera el que bajo estas líneas podéis apreciar y que todos reconoceréis. El "homenaje" a la selección argentina se quedó en una mezcla rara entre el Arsenal, Chelsea y la Selección Francesa. Mención aparte merecen las medias del paquete, que eran totalmente blancas. Las gafas de leer de Mercedes Milá tienen más salero que esas medias. Este sería el primer equipaje durante las dos primeras temporadas del equipo. La segunda equipación era la combinación del pantalón y medias de la primera equipación con una camiseta (con números eso sí) blanca de algodón que adolecía del mismo problema que las medias originales: Sosa, sosa y sosa. Pero como era de regaliz... De esta combinación no he adjuntado documento gráfico porque aunque no me hubiera costado nada de tiempo, no hubiera lucido nada sinceramente: una camiseta blanca con el logo de Elements; fin. La segunda temporada se introdujo con bastante éxito y acierto las famosas "medias de cocacola" de las cuales Alberto tenía suministros que llegaban hasta límites insospechados, pudiendo llegar a abastecer a todos los integrantes del equipo en repetidas ocasiones. Las medias seguían siendo blancas pero al tener detalles en rojo hacía juego con los detalles de pantalón y camiseta y quedaba una combinación cromática bastante curiosa. Volviendo a la camiseta, diremos que a nadie le terminaba de quedar bien. El número, aunque subió más y mejor que el anterior, seguía quedando bajo y aparte era bastante feo: podrá tener ese toque "retro-guay", pero retro son las botas de Santillana y nadie se las pone. El cuello aparte de horrible era muy incómodo. El tejido daba calor (mucho calor) y sólo existía el modelo de manga larga (más calor), aunque incomprensiblemente Kike tenía un modelo de manga corta y nunca supimos por qué. Todos le envidiábamos en verano. En resumen, esta equipación tiene el honor de ser la primera en el equipo, y con ella ascendimos, pero mirada objetivamente y sin el factor "afecto" de por medio, dejaba bastante que desear: 1. No era fea, pero no era la combinación deseada en un principio y 2. Era incómoda, cojones. No nos engañemos. Así que como ya estábamos un poco hasta las pelotas de ella, la enterramos alegremente cuando decidimos renovarnos al comienzo de la 3ª temporada.
La 1ª temporada ascendimos, la 2ª pasamos sin pena ni gloria, y por eso para comenzar la 3ª quisimos hacer un pequeño "re-style" en todos los aspectos del equipo. Nos invadió la euforia y decidimos tirar la casa por la ventana comprando 2 (dos) equipaciones diferentes. Además tuvimos la potra de encontrarnos con un patrocinador (esa también es otra historia), así que la ocasión la pintaban calva. Hubo muchas charlas para llevar a buen puerto la nueva equipación. Unos querían vestir como el Atlético de Madrid (con el cual guardamos ciertas semejanzas, pero sí: esa es otra historia) otros en un afán por la originalidad buscaban "como el Ajax pero en verde" (???) o a rayas amarillas y blancas (!!!). Lo que estaba claro es que había que hacer algo nuevo. Y se asentó la idea de que los colores establecidos esta temporada serían los "oficiales" para el resto de temporadas. Nada de ir cambiando de camiseta cada año como Salva o Javi Moreno. Imagen de equipo. Cobró fuerza desde el principio el 100% Rojo. Y haciendo un guiño al origen del equipo volvíamos a la siempre elegante equipación blanca. A eso le añadiríamos la presencia de un patrocinador que siempre pareces más importante. Luego se perfilarían los detalles: uno de manga larga y otro de manga corta. Cada uno su talla y por separado pantalón y camiseta, así todos contentos. La blanca sería la primera equipación y la roja la segunda, aunque en la práctica la norma es jugar en casa de blanco y fuera de rojo o haciendo cualquier combinación rojo/blanco. En esta ocasión el desembolso supuso más esfuerzo y la ayuda del patrocinio supo a poco, pero el resultado es óptimo: Tejido mucho más ligero y transpirable, tallas individualizadas, los números (por fin!!) están en la espalda-alta, el cuello es redondo (bien!) y ya no es rígido, y la disponibilidad de colores permite la variación de uniformes totalmente diferentes si las circunstancias lo requieren.
Por otra parte, existe la oferta de que si quedamos primeros (1os.) habrá renovación completa de equipación por cuenta del patrocinador. Pero.... es otra historia.
PD: ¿Os quejaréis de artículo eh, cabrones? Además me he pegado un buen rato con los programas de diseño para currarme las camisetas. Quiero comentarios!!!